El viernes salí con Patri a tomar algo y la cosa se lió bastante, al final conocimos a un grupo de música que físicamente eran como ZZ Top con el Cigala. Eran majos pero muy pesados. Cuando salimos del bar eran como las 9 de la mañana... aparentemente, porque en realidad eran las 4.30, cada día anochece más tarde (sobre las 11) y amanece más temprano, y dentro de un mes más o menos ni siquiera anochecerá, yy a pesar de eso no existen las persianas. Estonia es un país que tiene puntos de wifi hasta en las alcantarillas, pero no hay persianas, yo no lo entiendo.
En fin! Dentro de poco contaré como fue la semana que estuvieron aquí mis amigas, y el fin de semana en Oslo! Por lo demás, el viernes pasado fue mi última entrega, qué gustazo! Ya no me queda más que la performance esa absurda que no me apetece NADA hacer, pero en fin, son 4 créditos...
Hoy realmente me he sentido como si estuviera en verano! Nicolas, Jan y otros amigos han decidido ir a la playa a hacer un picnic, ya que había unos 20º así que hemos estado en la playa toda la tarde TOMANDO EL SOL, en la misma playa en la que hace sólo tres meses caminé sobre el agua congelada. También hemos estado practicando un deporte que se llama slickline, podéis buscarlo en internet y veréis lo que es, la verdad es que no he conseguido ningún avance, hay que practicar y practicar y practicar. Además me han acribillado los mosquitos, y no me he bañado porque no llevaba el bañador, pero ganas no faltaban.
Mañana hay organizada una barbacoa en la playa, van prácticamente todos los erasmus. Y a mí me quedan aquí menos de dos semanas, y de momento tengo la barbacoa, una cena, la performance, una macro fiesta en Tartu, visita a Vilnius y Riga y una exposición propia. Vamos, que todo lo que me aburrí estos dos meses pasados no me voy a aburrir estas dos semanas
domingo, 20 de mayo de 2012
domingo, 6 de mayo de 2012
Ciclo de cine de terror
Hace poco empecé una asignatura nueva que, de momento, es la que encuentro más interesante de todas. Este lunes pasado, la profesora nos convocó a cada uno a una hora concreta en un teatro viejo del casco antiguo para hacer un ejercicio. Nos tapó los ojos y teníamos que deambular por el teatro durante un tiempo, el que ella creyera necesario, investigando el lugar para captar todas las sensaciones. Yo estuve 20 minutos más o menos, aunque se me hizo eterno.
Al día siguiente nos teníamos que reunir con ella, también uno por uno, para contarle lo que habíamos sentido al hacer el ejercicio y ahora tenemos que hacer un trabajo sobre ello, que será el proyecto final de esta asignatura.
Pues bien, los que me conozcáis de cerca sabréis que soy un poquito asustadiza (vamos que soy una cagá), no me gusta la oscuridad y jamás he querido ver películas de miedo, aunque alguna ha caído. Lo que yo sentí en ese lugar, y así es como se lo conté a mi profesora, al pincipio era divertido, entretenido y emocionante, me crucé con otra compañera que estaba haciendo el mismo ejercicio y era curioso ir investigando por el lugar. Pero llegó un momento en el que la profesora se llevó a la otra alumna fuera, así que yo me quedé sola (creo, eso pensaba yo), y ahí fue cuando empecé a mosquearme. Como ya he dicho, tengo miedo a la oscuridad, y al tener los ojos tapados obviamente no sabía si ese lugar tenía luz o no, pero para mi estaba oscuro así que ya iba tocando todo con miedo, además ya había recorrido todo el lugar, llegué a la última pared que me quedaba por explorar y era como de roca, como una cueva, y yo lo único que quería era salir de ahí cuanto antes, pero claro no podía quitarme la venda porque entonces no valía el ejercicio, y además oía a alguien ahí, caminando super despacio, que probablemente sería el dueño del teatro o algo así, pero yo pensé que estaba sola. Vamos que al final estaba acojonadísima, además cuando tocaba los asientos para guiarme por el lugar, sentía que en cualquier momento iba a tocar algo desagradable, o a alguien, o encontrarme con algo inesperado. Era como esos momentos de las películas de miedo en los que la música, la situación, la cara del personaje, todo te dice que algo está a punto de pasar, los segundos previos al gran susto.
Mi profesora, al oír toda esta explicación me sugirió que hiciera el trabajo recopilando esos momentos de las películas de terror, por lo que tenía que verlas. Así que el martes empecé mi "ciclo de cine de miedo", y la verdad es que no es tan terrible. Al principio veía las películas poniéndolas de fondo, mientras dibujaba u ordenaba la habitación, así que no prestaba toda la atención, sólo apuntaba los momentos de tensión, pero al final acababa mirando e incluso me he hecho MUY FAN de la saga de Scream. Nunca hubiera pensado que me gustarían estas películas, pero cada vez me apetecen más!
Al día siguiente nos teníamos que reunir con ella, también uno por uno, para contarle lo que habíamos sentido al hacer el ejercicio y ahora tenemos que hacer un trabajo sobre ello, que será el proyecto final de esta asignatura.
Pues bien, los que me conozcáis de cerca sabréis que soy un poquito asustadiza (vamos que soy una cagá), no me gusta la oscuridad y jamás he querido ver películas de miedo, aunque alguna ha caído. Lo que yo sentí en ese lugar, y así es como se lo conté a mi profesora, al pincipio era divertido, entretenido y emocionante, me crucé con otra compañera que estaba haciendo el mismo ejercicio y era curioso ir investigando por el lugar. Pero llegó un momento en el que la profesora se llevó a la otra alumna fuera, así que yo me quedé sola (creo, eso pensaba yo), y ahí fue cuando empecé a mosquearme. Como ya he dicho, tengo miedo a la oscuridad, y al tener los ojos tapados obviamente no sabía si ese lugar tenía luz o no, pero para mi estaba oscuro así que ya iba tocando todo con miedo, además ya había recorrido todo el lugar, llegué a la última pared que me quedaba por explorar y era como de roca, como una cueva, y yo lo único que quería era salir de ahí cuanto antes, pero claro no podía quitarme la venda porque entonces no valía el ejercicio, y además oía a alguien ahí, caminando super despacio, que probablemente sería el dueño del teatro o algo así, pero yo pensé que estaba sola. Vamos que al final estaba acojonadísima, además cuando tocaba los asientos para guiarme por el lugar, sentía que en cualquier momento iba a tocar algo desagradable, o a alguien, o encontrarme con algo inesperado. Era como esos momentos de las películas de miedo en los que la música, la situación, la cara del personaje, todo te dice que algo está a punto de pasar, los segundos previos al gran susto.
Mi profesora, al oír toda esta explicación me sugirió que hiciera el trabajo recopilando esos momentos de las películas de terror, por lo que tenía que verlas. Así que el martes empecé mi "ciclo de cine de miedo", y la verdad es que no es tan terrible. Al principio veía las películas poniéndolas de fondo, mientras dibujaba u ordenaba la habitación, así que no prestaba toda la atención, sólo apuntaba los momentos de tensión, pero al final acababa mirando e incluso me he hecho MUY FAN de la saga de Scream. Nunca hubiera pensado que me gustarían estas películas, pero cada vez me apetecen más!
martes, 1 de mayo de 2012
La semana pasada estuvieron por aquí mis padres. Estuvo muy bien, vimos muchísimas cosas y encontré muchos rincones interesantes de Tallin que no conocía. Eso sí, la vida del turista es agotadora... Uno de los días fuimos a Helsinki, pero llovía muchísimo y todo estaba muy gris y frío, así que no disfruté realmente de la ciudad. Además creo que no es una ciudad turística, es más para vivirla y disfrutarla un tiempo allí, sobre todo en verano que debe ser maravillosa.
Subiré las fotos dentro de poco.
Por lo demás, estoy liadísima, tengo todas las entregas de todos los trabajos la semana que viene así que no paro, no hago otra cosa más que pintar y pintar. Además ahora tengo que hacer un trabajo sobre películas de miedo y tengo que verlas y lo estoy pasando fatal, no sé como voy a sobrevivir a esto, si no me da un infarto...
Y justo ahora que tengo tanto trabajo, hago amistad con la gente del hostal. El otro día bajó una chica que vive arriba a decirme que estaban bebiendo antes de salir y que si me unía a ellos, así que subí un rato a entretenerme. El sábado pasado fue también la fiesta de cumpleaños de una y de despedida de otra, así que estuvimos cenando en el salón. Llegó un momento que subió una chica super alterada diciendo que bajáramos, llegamos a la calle y estaba toda la puerta llena de tarta, resulta que venían cuatro y traían una tarta y alguien intentó robársela y acabó esparcida por todo el portal del hostal. Pobres (¿pero quién narices quiere robar una tarta?).
Ahora seguiré viendo películas de miedo y pintando!
Subiré las fotos dentro de poco.
Por lo demás, estoy liadísima, tengo todas las entregas de todos los trabajos la semana que viene así que no paro, no hago otra cosa más que pintar y pintar. Además ahora tengo que hacer un trabajo sobre películas de miedo y tengo que verlas y lo estoy pasando fatal, no sé como voy a sobrevivir a esto, si no me da un infarto...
Y justo ahora que tengo tanto trabajo, hago amistad con la gente del hostal. El otro día bajó una chica que vive arriba a decirme que estaban bebiendo antes de salir y que si me unía a ellos, así que subí un rato a entretenerme. El sábado pasado fue también la fiesta de cumpleaños de una y de despedida de otra, así que estuvimos cenando en el salón. Llegó un momento que subió una chica super alterada diciendo que bajáramos, llegamos a la calle y estaba toda la puerta llena de tarta, resulta que venían cuatro y traían una tarta y alguien intentó robársela y acabó esparcida por todo el portal del hostal. Pobres (¿pero quién narices quiere robar una tarta?).
Ahora seguiré viendo películas de miedo y pintando!
martes, 17 de abril de 2012
Vida en el Euphoria
El jueves volvimos a tener cena en el hostal. Esta vez Lander no vino y Juan sólo estuvo 10 minutos, pero igualmente yo me quedé. Estuvo mejor que la anterior, porque ya conocía un poco más a la gente así que estuve hablando con unos y otros de muchísimas cosas. Cuando el dueño se fue le dejó la llave a un chico porque todavía quedábamos por ahí unos cuantos, así que nos pasamos a la cocina común y encontramos una botella de tequila a medias que se habían dejado unos inquilinos que ya se habían ido, también habían dejado limones así que nos echamos unos chupitos! Eso sí, era un tequila bastante flojo, nada como el Capitán Tiquela del Moonlight...
La noche acabó muy bien, conocí mucha más gente que vive allí e hice más amistad con todos, ya que al día siguiente me fui con ellos a un concierto. El dueño del hostal es cantautor e hizo una actuación en un bar, fuimos casi todos los del hostal, estábamos en plan "Euphoria family". Además, Johnatan canta muy bien y fue un concierto entretenido y muy bonito.
El sábado se suponía que me iba a una cena en la residencia de mis amigos, pero no había nada claro, entonces vino un amigo del hostal y me dijo que iba a hacer unas tartas y que si le quería ayudar, así que al final acabé pasando la tarde haciendo tartas. Cuando ya estábamos terminando vino Kaddy, una empleada del hostal y estuvimos cenando los tres. La verdad es que creo que estoy haciendo mucha más amistad con la gente de aquí que con mis propios compañeros de clase. Y pensaréis que es normal ya que vivo con ellos, pero no, porque no los veo tanto.
Naguemist Vilma!
El miércoles pasado fue la fiesta de despedida de las clases de estón. Cada uno llevaba algo de comer, normalmente típico del país, y cenamos todos juntos en la clase. Yo llegué bastante tarde porque tenía que salir de otra clase, ir a cambiarme... Bueno, cambiarme porque la profesora exigió un protocolo: las chicas con falda o vestido, y los chicos con camisa y corbata. Se supone que había que decir algo en estón pero como llegué tan tarde me libré. Eso sí, me tuve que quedar con las sobras de la comida y ya estaba todo el mundo con el postre.
Fue una pena despedirse de Vilma. Aunque las clases eran un aburrimiento, la mujer era muy divertida (claro, con lo loca que estaba algo de diversión tenía que haber).
Pero no va a ser la última vez que la veamos, porque en mayo haremos una barbacoa de reencuentro.
Después de la cena unos chicos húngaros nos invitaron a su casa, así que fuimos un rato a beber allí. Lo echaba de menos, era la primera vez en casi dos meses que estaba de fiesta con los amigos de mi clase. Y ha sido la última de momento. Entre trabajos y vaguería, no sale nadie y al final se va a pasar la erasmus sin que llegue a pasar más tiempo con ellos.
martes, 10 de abril de 2012
Me lían... II parte
El miércoles pasado tuve una experiencia deja-vu. Estaba yo en mi habitación tranquilamente dibujando, cuando oí gente en la cocina y como llevaba todo el día sola, pues salí a relacionarme. Estaban mis compañeros españoles con un amigo, que se iban a ir de fiesta más tarde. Trataron de convencerme, pero me negué en rotundo. Luego vinieron tres chicas, Lucía, Geli y Lidia, e intentaron convencerme otra vez, pero me volví a negar en rotundo.
Al final me puse a beber un poquito, una cosa llevó a la otra... Una hora después estaba en la puerta de la discoteca diciendo que me llamaba Asun (es que si estás en el evento de facebook sale más barato y yo no estaba pero Asun sí y no iba... en fin, que me ahorré 6€). La fiesta estuvo bastante bien, como siempre en el Münt, con todo a 1€ (y las pintas de cerveza a ese precio...) además no había tanta gente como otras veces, eso sí, sólo había estones, normalmente cuando he ido estaba lleno de erasmus. Al final acabamos conociendo más españoles y todo.
Luego nos fuimos al Nimeta, como siempre, ese antro en el que me robaron mi queridísimo abrigo. Ahora cada vez que voy allí estoy alerta y ya no estoy en lo que estoy.
Al salir de allí convencimos a las chicas para que se vinieran al hostal, no sin antes parar en el puestos de las hamburguesas del infierno (esas que están buenísimas pero luego explotan en el estómago, pero fuimos por Lander, yo sólo compré patatas). También me eché una carrera al 24h para comprar carbones de cachimba, claro que si. Ya en el hostal despertamos a Juan, le robamos la almohada (pobrecico) nos hicimos una cachimba y a las 7 de la mañana, ya de día, nos fuimos a la cama.
La fiesta se alargó más que una boda gitana. Al día siguiente fuimos a comer al Vapiano, un restaurante italiano con una extraña pero efectiva forma de atender, y todo muy muy rico (y a buen precio). Por la tarde acabamos viendo una película, vagueando... Total que al final las chicas se fueron a las 10 de la noche.
Después de eso mi vida social ha sido completamente nula y mi vida en general bastante triste, ya que, quitando que salí un día a comprar para poder sobrevivir, he pasado 5 días encerrada en mi habitación y totalmente sola. De mis compañeros, uno no estaba y el otro estudiando. Mis amigos, unos en San Petersburgo, otros no podían quedar... En fin, muy triste todo. A ver si mejora porque a este paso no sobrevivo a la depresión.
lunes, 2 de abril de 2012
Tallin music week
Esta semana ha tenido lugar la "Tallin music week", que como podréis imaginar por el nombre, es un festival de música de tres días por toda la ciudad, sobre todo de grupos estones pero también gente de Letonia, Lituania, Dinamarca, Finlandia, Reino Unido... Así que el viernes fui con Skye a uno de los conciertos, un amigo suyo había hecho la proyección para uno de los grupos. Fue en el mismo bar donde comimos el jueves después de la performance. Aquí hay muchos locales que de día son restaurantes sin mucha variedad, sopas, ensaladas, algo de picar y poco más, y por la noche se transforman en locales increíbles de fiesta, y la verdad es que son bastante grandes, este tenía varias salas. Cuando llegamos estaba tocando este grupo de la foto:
Eran estones y cantaban en estón, no estuvo muy animado ya que la cantante era bastante sosilla. Después tocó el grupo con el que colaboraba el amigo de Skye, también estones pero cantaban en inglés y la verdad es que me gustó bastaaante, sonaban muy muy bien y por aquí os dejo uno de sus vídeos:
Después vimos a un grupo del Reino Unido cuya música sonaba genial pero la voz del cantante era como ronco de resaca, no le pegaba mucho.
En general fue una noche interesante pero un poco aburrida (con deciros que a la 1:30 estaba en casa...) y esto me da pie a hablar de la gente de artes que he conocido aquí. Son todos gente súper interesante, con los que tienes conversaciones que realmente merece la pena, pero el problema es que son muy sosos... Apenas salen, y cuando lo hacen es en un plan muy muy tranquilo, un plan que viene bien de vez en cuando, pero no siempre.
Ya lo dije, aquí para tener fiesta hay que salir con los españoles (eso es así) pero tampoco quiero abusar de eso porque he estado saliendo mucho con ellos y siento que no estoy practicando nada el inglés.
En fin, que así han sido mis últimas semanas aquí, estoy un poco aburrida y cansada de esto, se me está haciendo muy monótono y está empezando a entrarme la morriña. Pero se va a acabar, porque tengo varios proyectos en mente, tanto artísticos y trabajos de clase que me gustan, como viajes que haré pronto, puede que sola porque no encuentro compañeros, pero los haré, no me voy a quedar estancada en Tallin dos meses más.
Y dentro de 20 días vienen mis padres, ¡y tengo unas ganas locas de que lleguen!
Ahora, un llamamiento a mis amigos: por favor, ¡venid a visitarme! Sé que no lo haréis, pero por pedir que no quede...
domingo, 1 de abril de 2012
Performance en el mercado ruso
Ya os conté que tengo una asignatura que se llama "dance performance". Pues bien, este jueves teníamos que hacer eso, lo que es una performance (si no sabéis lo que es, os puedo jurar que en realidad yo tampoco lo sé) en el mercado ruso. El día de antes me acosté a las 4 de la mañana, entre otras cosas pensando en qué coño podía hacer yo en el mercado ruso y sin saber qué narices es exactamente una performance. Que sí, que he visto muchas y lo he dado en varias asignaturas, pero mira ese tipo de "arte"... no es lo mío, definitivamente (principalmente porque no lo entiendo, pero bueno cada uno verá). Así que me acosté con ninguna idea sobre eso, me levanté de la misma forma y cuando salí de casa lo único que se me ocurrió fue coger el rollo de cinta de carrocero "por si acaso", a ver si con eso me inspiraba. Al encontrarme con Skye, estaba tan acojonada como yo, pero por lo menos ella llevaba una idea, y bastante buena, pero ninguna de las dos quería hacer nada, intenté persuadirla para que entre las dos habláramos con la profesora para ver si nos podíamos librar, pero nada. Al llegar al mercado estaba todavía más en blanco.
Ya os hablé un poco del mercado ruso, os dije que es como los invasores, pero en lugar de gitanas vendiendo bragas y gitanos vendiendo naranjas y melones tienes rusas vendiendo bragas y rusos vendiendo antigüedades soviéticas (y naranjas y melones, que fruta también hay).
Así que imaginad el percal, a ver qué narices hacía yo ahí en medio. Hay un hombre estón en mi clase, que los 40 ya no los cumplirá, que es performista (esto suena mejor en inglés) y tiene un "numerito" con un traje de pájaro. Él fue el primero en actuar, se puso su traje de pájaro azul celeste, con una máscara de gas del mismo color con pico y cresta de plumas, y se adentró en el mercado con postura de zombie (brazos hacia delante) mientras silbaba imitando a un pájaro. Obviamente podéis imaginar cómo lo miraba la gente. Las rusas decían "Uy qué pájaro más raro" (y no, no es que haya aprendido ruso, es que la profesora nos lo dijo). Pero duró bien poco, a los dos minutos apareció el de seguridad y lo echó.
Después les tocó a Skye y July, que quisieron hacerlo a la vez. Skye compró huevos y plátanos y July unas zapatillas viejas. La primera se puso una máscara de gato (que me ha regalado :D) y empezó a estrujar los huevos, los plátanos y unos cigarros en una bolsa. Luego echó el mejunje en un bote de cristal y ya está.
La otra extendió una tela en el suelo, echó agua en una zapatilla y aceite de oliva en la otra, metió los pies y empezó a chapotear, así hasta que se le acabó el aceite.
Entre medias de todo esto, la gente quiso echarnos, volvió el de seguridad, esta vez con cara de "¿Me estáis vacilando?" (daba igual la cara que trajera, era ruso, y los rusos imponen) y trajo al que parecía ser un cargo mayor, quizá el "jefe" de la seguridad, o del mercado o algo así. La profesora y el hombre estón hablaron con ellos y al menos les dejaron terminar, pero tras eso nos volvieron a echar.
Y después de todo esto, quedaba yo, ya que sólo somos cuatro en esa clase... Ahora veréis mi tremenda originalidad y pasión por el arte de las performances (no no no, eso mundo NO es para mí en absoluto). Cogí la cinta de carrocero que llevaba en el bolso, y como pasaba de que me echaran del mercado, comencé a rodear la vaya de fuera con la cinta, así hasta que se acabó, y como igualmente el de seguridad salió a tocar las narices otra vez, deshice lo que había hecho recogiendo la cinta. Fin ("woooooww" grasias, grasias, lo sé). Sí, fue una mierda, pero me sirvió para salir del paso, que era lo que quería.
Después Skye y yo nos fuimos a comer a un bar. Más tarde vino Max y luego nos fuimos los tres a la clase de estón, pero estaba cerrado así que fuimos al Kodu Bar a tomar algo. Fue una tarde guay, lo necesitaba porque últimamente estoy muy aburrida, la gente está muy ocupada con trabajos o muy vaga para salir, y a mí todos los días me parecen lo mismo y me los paso sola o con los españoles, así que siento que no estoy aprendiendo inglés ni nada, que estoy perdiendo el tiempo. En fin, sólo espero que a partir de ahora cambie eso un poco.
La cena del Euphoria
El martes pasado tuvimos la cena en el hostal. Tengo fotos (creo) pero las hice con la cámara de carrete que compré en el mercado ruso y que ESPERO que funcione, así que hasta que no saque las fotos no sabré si tengo o no, y en caso de que sí, entonces las subiré. No fue lo que esperaba, porque claro estoy acostumbrada a las típicas "cenas", véase cenas de clase y esas cosas, que todos sabéis cómo son. Pero esto fue más en plan "ven al salón, trae algo e intégrate como puedas" porque bueno ya sabéis como es el salón de mi hostal, cada uno estaba con gente que conocía y poca gente había llevado comida. Yo llevé sangría hecha con vino ruso. Es la primera sangría que hago y salió rica rica (y tan rica, hay que ver lo poco que duró...). Cuando vinieron Lander y Juan trajeron una tortilla muy rica que había hecho Juan, que también triunfó. El resto de la comida eran verduras, ensalada, patatas y esas cosas, poco más... Aunque alguien trajo al final un pastel de chocolate que era un delito, madre mía...
Después Kadi (una de las chicas que trabaja en la recepción del hostal) hizo una cachimba pero como podréis imaginar también duró poco, con todos los que estábamos...
Pero fue una buena ocasión para conocer a la gente con la que vivo. Confirmamos definitivamente que la loca está realmente muy muy muy loca (se pasó la noche cogiendo en brazos a la gente, ni que fuéramos su gato, que por cierto también estuvo en la cena) pero el resto de la gente es bastante normal y muy maja. En los dos pisos que hay arriba viven dos húngaras con la loca y un irlandés y dos estones, creo, la verdad es que tampoco estoy segura.
Espero tener las fotos pronto, además el dueño del hostal también hizo muchas, a ver si las consigo.
domingo, 25 de marzo de 2012
El robo
El lunes pasado nos enteramos de que habían robado dinero a una chica que vive en el hostal. En un principio, como el robo había sido entre el sábado y el domingo (es decir, en mi cumpleaños) pensaban que lo había hecho alguien de mi fiesta, lo cual no me gustó un pelo porque me sentía incómoda sabiendo que sospechaban de mis amigos, y sabiendo que es mentira ya que estuvimos toda la noche en mi habitación.
El domingo Juan despertó y vio a alguien entrar en su habitación y quedarse en la puerta unos diez minutos mirando, hasta que le preguntó quién era y qué quería, y la mujer se fue. Ese mismo día alguien intentó abrir la puerta de mi habitación mientras yo estaba dentro, pero claro estaba cerrada.
Así que con toda esta información y la de otra gente del hostal, dicen que son un hombre y una mujer, que él tiene pinta de yonki y ella es rubia es todo lo que sabemos. El dueño del hostal dice que este tipo de ladrones suele volver, así que ultimamente somos muy precavidos con dejar las puertas de las habitaciones abiertas y con ver qué desconocido anda por el hostal.
Y a raíz de esto, el martes que viene haremos una cena. ¿Por qué? No es que vayamos a celebrar el robo, es para conocernos todos los que vivimos aquí, ya que yo no tengo ni idea de quién vive aquí, quién no, quién está de visita, etc. Y así están las cosas.
Cumpleaños
La semana pasada fueron los cumpleaños de Niolas y el mío. Habíamos dicho que íbamos a hacer una fiesta los dos juntos para celebrarlo, pero entre unas cosas y otras celebramos el suyo en su día, el martes, yendo a cenar a F Hoone. Y el mío lo celebramos también en su día, el sábado.
Decidí invitar a la gente a cenar a mi hostal. Sinceramente, no esperaba que vinieran muchos, y efectivamente a cenar no vinieron muchos pero después si, nos llegamos a juntar bastante gente. Fue muy divertido, pasamos el rato en mi habitación y luego fuimos a Levicas, un bar de por aquí que está muy muy bien, es como una cueva por dentro y tiene varias salas. Una de ellas, en la que estuvimos, es totalmente a oscuras, proyectan imágenes en la pared y hay un DJ que casualmente ese día pinchó música de los 80, incluso le pedí que me pusiera ABBA y bailamos "Dancing queen" (ya echaba yo de menos esos momentos super horteras).
Después del levicas fui con Patri y Minjae (las dos chicas que conocí en Laponia) de vuelta a mi hostal y por el camino nos colamos en el jardín de la casa donde doy las clases de estón a encender una bengala, a eso de la 5 de la mañana. Después nos compramos una hamburguesa en un sitio que hay al lado de mi hostal. En principio están deliciosas, más a esas horas de la mañana que te comes lo que sea. Pero una hora después de comerla es como si tuvieras un gremlin en el estómago, horroroso.
Ahora mismo no recuerdo si esta semana he hecho algo más. Intentaré tener esto al día, porque sino se me va a ir olvidando todo.
miércoles, 21 de marzo de 2012
Viaje a Laponia: día 3 y final
Me había olvidado por completo del blog, esto no puede ser, sino cuanto más tarde en actualizar menos recordaré las cosas y peor lo contaré, así que ahora vendrán varias entradas de golpe para ponerme/poneos al día.
Todo esto me dejó impresionada, después de lo que había visto el día anterior, este río helado creo que es el lugar más bonito que he visto en mi vida. Cuando terminó este viaje era como que había visto tantas cosas bonitas que necesitaba parar y cerrar los ojos para almacenarlo todo (qué cursi queda todo esto, pero es que fue así). Aquí mismo hicimos una barbacoa y comimos perritos calientes de cerdo, que no de reno, ya habíamos tenido bastante reno de momento.
Bueno el último día del viaje a Laponia fue realmente precioso. Nos levantamos mucho más tarde, lo cual me vino muy bien porque yo estaba reventada después del día anterior. El autobús nos dejó al lado de unas cabañas y nos adentramos en la naturaleza, caminando por un bosque nevado unos 15 minutos, hasta que llegamos a esta preciosidad de paisaje.
Todo esto me dejó impresionada, después de lo que había visto el día anterior, este río helado creo que es el lugar más bonito que he visto en mi vida. Cuando terminó este viaje era como que había visto tantas cosas bonitas que necesitaba parar y cerrar los ojos para almacenarlo todo (qué cursi queda todo esto, pero es que fue así). Aquí mismo hicimos una barbacoa y comimos perritos calientes de cerdo, que no de reno, ya habíamos tenido bastante reno de momento.
Y esto era la recta final del viaje. Al dejar este lugar el autobús se dirigía directamente a Helsinky, pero por el camino, mientras decidíamos qué películas íbamos a ver en las 10 horas de viaje, un chico dijo que miráramos a la derecha, y ahí estaban, luces del norte, ¡por fin! No lo había dicho pero las dos noches anteriores habíamos salido a buscarlas sin éxito. Así que le pedimos al conductor que parara el autobús y bajamos para verla bien. Era una luz verde al principio finita, luego fue engordando y realmente podías ver cómo avanzaba hasta que finalmente desapareció. Como es lógico no era fácil captarlo en una foto, y esto es lo que pude conseguir.
Y tras un laaaargo viaje en autobús, cogimos el ferry de nuevo a Tallin, así que pude despedirme de Helsinky y ver la ciudad alejarse (pero no ver la ciudad en sí), aunque volveré, sólo está a dos horas y media por mar.
Había pequeñas islitas con casitas de madera en medio del mar, dicen que son casas de verano de alguna gente, parecía de cuento.
jueves, 15 de marzo de 2012
Viaje a Laponia: día 2
Ya están las fotos de la ESN Tallin del viaje a Laponia, así que por fin terminaré de contarlo. El segundo día madrugamos bastante para ir a la granja de huskys, allí nos estuvieron explicando cómo teníamos que conducir los trineos, lo que debíamos y no debíamos hacer y todo eso. Básicamente lo que te dicen es que los perros sólo quieren correr, correr y correr. Los trineos tenían una parte en la que iba el conductor y otra en la que se metía la otra persona, teníamos que ir por parejas. El recorrido era de unos dos o tres minutos, y a mitad el que conducía tenía que frenar y el que estaba dentro se ponía a conducir y el otro se metía en la cesta. Si se te soltaba el freno, el trineo se te iba porque los perros salían escopetaos, además se peleaban entre ellos y con los perros de los otros trineos, fue una locura. Yo iba primero en la cesta y cuando me tocó cambiar se me escapó el freno y los perros se me fueron un poco, pero los controlé en seguida. La verdad es que fue una experiencia genial. Mi pareja era Patri, la otra española que había en el viaje, casualmente de Toledo. Hice alguna foto mientras estaba dentro y mientras conducía, pero las hice con una de esas cámaras desechables y aún no he terminado el carrete, así que cuando lo revele sabré qué sale de ahí. Cuando estaba en la cesta esa me di cuenta de que estaba sentada sobre una piel de husky. Bueno, más que una piel, era el cadáver de un husky, tenía incluso las patas y el rabo, menos mal que no tenía la cabeza pero me dio muchiiiisimo asco, lo único que quería era salir de ahí.
Una vez terminada la carrera de todos, los perros se tranquilizaron y eran majísimos, y tan monos... Me pasé un buen rato sobándolos, luego mis guantes olían a perrete mojado (que para los que no lo hayan olido nunca, es uno de los peores olores de este mundo)
Después de eso, unos cuantos se fueron a esquiar, bueno más bien unos pocos, porque valía un pastón. Los demás nos fuimos a pasear por la naturaleza de Laponia. Subimos una montaña, el nivel de nieve llegaba por las rodillas en unos sitios, por el culo en otros. Estuvimos caminando una media hora en esas condiciones (además yo como soy asín de lista, me dejé los guantes en el autobús...) pero la verdad es que mereció la pena, porque lo que vimos ahí arriba era realmente precioso.
Los árboles parecían esculturas. La nieve que tienen encima no es la que cae del cielo, es que las hojas se congelan y se van formando capas y capas de hielo.
A mí me pareció realmente fascinante, en este viaje he visto los paisajes más bonitos que he visto en mi vida.
Aquí con Patri.
Después del paseo yo estaba empapada, con mucho frío y hambrienta. Serían ya las tres o así y yo pensaba que nos íbamos a comer, pero noooo, nos llevaron a una granja de renos, a conducir renos. Bueno condujeron los demás, porque lo que éramos Patri y yo, con el frío que teníamos estábamos tiritando así que en cuanto nos dijeron que podíamos quedarnos en una cabaña y tomar café y pastas gratis, nos faltó tiempo para meternos. Yo me pasé toda la tarde al lado del radiador tratando de secarme, ya que de cintura para abajo estaba empapada.
Después la bajada resultó interesante y divertida (aunque luego me arrepentiría de eso) porque bajamos por unos toboganes de hielo, es decir nos deslizamos montaña abajo con nuestro propio culo. Fue muy muy divertido, pero claro, poca gente llevaba ropa de nieve, más bien íbamos casi todos con vaqueros y esas cosas, así que imaginad el percal luego...
Así que mientras la gente hacía esto:
Yo hacía esto:
Se me ve cabreada, verdad? Esta foto me hace mucha gracia, porque se ve a todo el mundo super feliz y yo estoy al fondo en penumbra con una cara de mala hostia increíble. Estaba harta, lo único que quería era irme a casa a cambiarme. Además me moría de hambre, sólo me había tomado un café y un bollo y eran casi las cuatro de la tarde. Y encima después de eso nos ofrecen un perrito caliente, y vamos conociendo a mi estómago, si me como un perrito después de un café con leche, lo siguiente es una gastroenteritis mu rica. Y en este país no existe el aquarius, NO EXISTE. De verdad espero no tener gastroenteritis, porque sino no se como voy a sobrevivir...
Y tras esto y lo que yo pensaba que era el final del día (nada más lejos de la realidad) nos llevaron a deslizarnos por una montaña con mini trineos. Patri y yo sólo lo hicimos una vez (ella estaba igual que yo) siempre con el pensamiento de "si no lo hago ahora, ¿cuando tendré oportunidad de hacerlo otra vez?" pero en seguida nos volvimos a meter en el bus.
Después nos ofrecieron un spa o volver a las cabañas. Yo me fui al spa, a relajarme. Mala idea, porque me relajé de más. Mi tensión, siempre por los suelos, no me permite entrar en una sauna, así que me pasé dos horas en una piscina templada con chorros masajeantes, aun sin ir a la sauna, eso resultó demasiado relajante para mi cuerpo y después estaba destrozada, no podía apenas moverme. Era una sensación muy extraña porque mi cuerpo estaba súper tranquilo pero mi corazón iba a mil (quizá influyó un poco el hecho de que me tomé un red bull...).
Por la noche unos cuantos nos fuimos a un karaoke que había al lado, pero no me gustó nada nada nada. Era como el típico bar de carretera sureño de las películas americanas, lleno de gente extraña y hombres fuertes que te miran como si fueras una presa fácil. Incluso había uno con un parche en el ojo, parche de pirata. Todo ello aderezado con señores mayores cantando viejas canciones finlandesas. Entre el percal que había y lo mal que me encontraba, no duré allí ni diez minutos.
Como podréis comprobar este fue el día más completito.
PD: Estas fotos deberían ir en el post anterior, pero como no las tenía, las pongo ahora:
Típica foto ESN con la bandera, en el pueblo de Santa Claus (aquí todavía era una marginada social)
Y aquí con Santa (a ver si lo encontráis)
domingo, 11 de marzo de 2012
Viaje a Laponia: día 1
Confieso que me da muchísima pereza actualizar con el viaje, cada día más, pero va, haré un esfuerzo e iré poquito a poquito.
El primer día fue, cómo decirlo... HORRIBLE. Como ya dije, yo iba sola al viaje, no conocía a nadie que fuera, y efectivamente cuando llegué al puerto y vi la gente, no conocía absolutamente a nadie. Cogimos el ferry hasta Helsinky, y claro, es muy fácil decir eso de "pues te presentas y ya está" pero no es tan fácil hacerlo, al menos a mí me cuesta muchísimo, así que el viaje en el barco me lo pasé sola sentada en una ventana como un fantasma del titanic. Hice un intento de integración cuando vi un grupo del viaje pero me acerqué, me miraron y cada uno siguió hablando a lo suyo, así que me quedé parada delante unos segundos hasta que supe reaccionar y darme la vuelta. La verdad es que fue un momento realmente patético.
Al llegar a Helsinky, nos esperaban diez horas de autobús hasta Laponia. La gente empezó a animarse y se estaban echando unas cervezas en el autobús, y ahí conocí alguna gente pero tampoco cogí confianza con nadie como para acoplarme.
La primera parada del viaje fue el pueblo de Papá Noel. Bajamos y nos pusimos a la cola para pasar a ver al hombre y hacernos una foto con él (la foto te la hace un elfo muy gracioso). También he estado esperando para actualizar porque quería tener las fotos de la ESN, entre las que se incluye la de Papá Noel, pero no puedo descargármelas, no sé por qué, así que ya cuando pueda las subiré.
Luego teníamos tiempo libre para pasear por allí, así que me pasé un buen rato en las tiendas de souvenirs, y la verdad es que creo que se me fue un poco de las manos, porque compré muchísimas cosas, os las enseñaré también (bueno algunas no, solo lo que compré para mí porque sino no es sorpresa para algunos) que, como no, me compré dos bolas de nieve (y no compré más porque me contuve muchísimo...), que por si alguien no lo sabe, las colecciono desde hace unos años, las típicas bolitas de cristal con el monumento de una ciudad dentro, que las agitas y cae nieve o purpurina, creo que tengo ya 27, bueno ahora 29, y más que tendré JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
Tras asaltar las tiendas, me fui a la oficina de correos y me puse a escribir unas postales, me entretuve tanto que cuando salí resulta que todo el mundo estaba ya en el autobús. Claaaaro, como yo iba sola, pues no me enteré de que había que irse ya. Me estaban buscando jaja
Santa Clause Village
Un ayudante de Santa Claus (jajaja) y un reno, baby reno
Uno de los días montamos en reno, y luego comimos reno. Muy guay todo
Bueno, a continuación vienen momentos muy muy muy patéticos de mi existencia, ya os he dicho que hasta que no conocí gente, fue bastante horrible. Cuando llegamos a la residencia donde nos hospedábamos repartimos las habitaciones, a mi me dieron una enorme para mí sola (ahí salí ganando) y bajé a comer... Vi que casi todas las mesas estaban llenas, sólo quedaban asientos libres en mesas apartadas, así que decidí que tenía un poco de... no se, ¿orgullo? como para sentarme sola en una mesa apartada y preferí irme a mi habitación sin comer. Pero bueno, tenía bocadillos. Conforme voy escribiendo esto me doy cuenta de lo patética que fue la situación. Pero esperad, que lo peor viene ahora.
Después de comer nos íbamos a tirarnos con unos trineos por una colina y luego a una sauna. Las chicas que había en la habitación al lado de la mía dijeron que la gente estaba ya abajo, así que me puse las botas, cogí unas cuantas cosas y bajé un minuto después que ellas. Se habían ido. Todos. Se habían ido todos, sin mi. Me habían dejado olvidada en la residencia. Sinceramente, me sentí muy muy mal, pero bueno, aproveché la tarde para ducharme con tranquilidad, echar una siesta, hablar con mis padres... Tampoco volvieron muy tarde, y luego bajé a cenar con esas chicas de la habitación de al lado (paso 1 de mi integración social). Después de cenar se organizó una fiesta en una de las cocinas y todos estábamos allí, así que ahí empecé a conocer gente, prácticamente a todos (paso 2 y final de mi integración social). Todos se fueron a acostar a eso de las 3, ya no quedaba nadie a esa hora! ¿Pero esta gente no sabe lo que es una fiesta? NO, no lo saben. Los únicos que nos quedamos hasta las 6 de la mañana fuimos, Patri, una de mis vecinas, casualmente española y Ivo, un chico estón de la ESN, los únicos valientes. Vale que había que levantarse a las 8, pero hombreeee, que estamos de viaje y de erasmus, coño, un poco de ánimo.
En fin, eso fue básicamente el primer día. Mañana más. O igual esta tarde, depende de las ganas que tenga de escribir, que el día siguiente fue el más completito.
viernes, 9 de marzo de 2012
Mi opinión de los estones
Si observáis esta foto ignorando el gato que está oliendo mis botas (es Keira, la gata de la loca del hostal) veréis los dos únicos abrigos que me traje a estonia. Obviamente el de la derecha es muchísimo más calentito. Pues el miércoles, me lo robaron. ¡Me robaron mi abrigo! No sabéis lo que es volver a casa sin abrigo a las 5 de la mañana a -10º. Y aparte de eso, me han jodido, y mucho, porque aunque en el corte inglés sea primavera, aquí NO, sigue haciendo un frío de cojones y este abrigo era una maravilla (y no muy barato...), y estoy muy triste, y rabiosa, y tengo frío... Y ahora sólo me queda ir a una de las muchas tiendas de ropa de segunda mano y comprarme algún abrigo por menos de 10€, algo que probablemente ha pertenecido a alguien que ya está muerto. Gracias, estones. Y esto me da paso para hablar de ellos.
La gente de estonia. Me centraré especialmente en la gente joven, y particularmente en la gente joven de fiesta. En principio los estones que yo conocía eran mis compañeros de clase y los del hostal, gente bastante normal, decente, agradable, gente con la que da gusto hablar. Hasta que sales de fiesta. Pero no a cualquier fiesta, porque en las que iba al principio, estas fiestas alternativas, todo seguía siendo bastante normal, la cosa se tuerce en las fiestas con música (cómo decirlo...) música de feria, ai seu te pego, danza kuduro (sí, también han llegado aquí las dos) david getta, pitbull traspasando fronteras... En fin, os hacéis una idea del tipo de fiestas a las que me refiero. Sobre las chicas estonas no tengo ninguna queja, en general son bastante simpáticas. Lo peor son los chicos. Los estones de fiesta lo único que quieren es pelear, da igual con quién, por qué y dónde. Pelear, por cualquier razón por muy absurda que sea. Que pasa uno y sin querer empuja un poco a otro, es normal, es un bar lleno de gente y es dificil moverse. Pues ale, se van detrás a pegarle. El miércoles en la fiesta (ah si, he olvidado decirlo, hubo otra fiesta de esas de todo a 1€) en menos de cuatro horas llegué a ver cinco peleas, una con rotura de vasos incluida.
Cada vez me gustan menos, pero como ya he dicho especialmente a los chicos. Normal, por otra parte, porque entre estos y la fauna que tengo en la clase de salsa, como para hacerse una buena opinión de ellos...
Próximamente, el viaje a Laponia día por día y auroras boreales en Tallin. Permanezcan atentos.
miércoles, 7 de marzo de 2012
Resumen de mi viaje a Laponia
jueves, 1 de marzo de 2012
Me voy a Laponia. Entrada locura repentina
Esta semana ha sido bastante buena ya que creo que todos mis profesores se han puesto de acuerdo para ponerse malos y no he tenido más que una clase. Aparte de eso, nada más interesante.
Se suponía que el lunes partía hacia Laponia en un viaje con la ESN. Pues bien, anoche, cuando me disponía a apagar el móvil, vi que tenía un correo electrónico de ellos, decía que si estábamos preparados para el viaje de MAÑANA. Es decir, que el viaje que yo pensaba que empezaba dentro de cuatro días, es hoy, y me entero sólo 15 horas antes, de las cuales tenía que dormir unas cuantas. Así que llevo toda la mañana de prisas, comprándome un bañador (porque vamos a unos baños), las bebidas (porque en Finlandia son muy caras y tengo que llevar para todo el viaje), la comida... En fin, una locura todo. Dior bendiga los móviles de última generación, de no ser porque los correos me llegan ahí, ni me hubiera enterado.
Es la historia de mi vida, no se si tomarme a mal lo desastre que soy y que siempre tenga que hacerlo todo a última hora, o tomarme a bien la suerte que tengo y que siempre salve el culo en el último momento. Creo que me quedo con lo último. True story.
Aparte de eso, la ciudad se ha vuelto un poco peligrosa (acabo de vivirlo) debido a que como las temperaturas están subiendo y ya superamos los 0º, toda la nieve y el hielo de los tejados se está deshaciendo y cae a puñaos, hay que ir con cuidado por la calle porque puedes ser sepultado por una masa de nieve (no es tan exagerado, pero imaginarlo así, es más divertido).
Lo dicho, me voy a Laponia. Ahora me esperan 2h de ferry hasta Helsinky y luego 8h de autobús (yuhu!) me he comprado una revista en estón o ruso, no se bien, pero es que las que son en inglés valen OCHO EURAZOS. La madre que los parió, pagar eso por una revista mensual. Aunque como me conozco bien, seguramente iré más de la mitad del viaje durmiendo y la otra mitad escuchando música. Además voy forever alone, ninguno de mis amigos quería ir al viaje pero yo me apunté sin más, así que no conozco a nadie (suena triste así dicho) pero mi don de gentes y mi encanto natural hará que todos me adoren en seguida ("Y todos me miran, me miran, me miran (...) pero al final, pero al finaaaal todos me amaraaaaaaan" homenaje a Gloria Trevi y a una de las canciones más homosexuales de la historia, me encanta).
No, en serio, espero conocer gente, sino será un viaje muy solitario, a lo Scarlett Johansson en "Lost in translation" pero en lugar de estar rodeada de japoneses, estaré rodeada de pingüinos.
¡Voy a conocer a Papá Noel! Yo soy más de los Reyes Magos, la verdad, así que no se va a acordar de mí porque este hombre no ha pasado por mi casa nunca a dejarme nada, pero a ver si lo convenzo para que caiga algo el año que viene.
"Eh, Paula, estás empezando a desvariar. Y tus amigos saben que estás un poco loca y tal, pero no tanto", esto es mi yo interior. Ya paro.
El lunes vuelvo, supongo que con muchas fotos, muchos amigos, un reno que le robaré a Papá Noel y algún dedo del pie menos perdido por congelación (en realidad creo que hace la misma temperatura que aquí).
Chao chao!
domingo, 26 de febrero de 2012
Fiesta de disfraces!
Ya que la semana pasada fue carnaval y aquí parece ser que no se celebra, los demás (no estones) sí que teníamos ganas así que Andrea (en la foto de abajo) organizó esta fiesta en la residencia. La fiesta no estuvo mal, pero no fue para tanto. Había disfraces muy divertidos, sobre todo para ser improvisados porque al ser erasmus no tenemos muchos medios, casi todo el mundo asaltó la tienda de ropa de segunda mano.
La verdad es que yo me aburrí un poco, Skye se fue a dormir en seguida y pasé el resto de la noche con Max (aquí abajo) que tampoco tardó en irse, y con Nicolas (abajo del todo), pero en cuanto él se fue a dormir yo tampoco tenía muchas ganas de quedarme, así que me fui a casa. Pero por lo menos no me quedé con las ganas de disfrazarme! Y sí, sé que repito, pero es lo más fácil que podía hacer aquí ya que no necesito más que maquillaje y laca. Además el disfraz gustó, un chico me pidió que cantara "Héroes" jaja
Y ayer, sábado, Franzeska celebraba su cumpleaños, también en la residencia. No me apetecía nada ir, ya que pilla un poco lejos de mi casa (una media hora andando) y estaba muy vaga jeje pero al final me animé y fui. Comí mucho sushi y mucho chocolate, y estuve allí un rato largo. Cuando volví a casa Lander y Juan intentaron convencerme de salir, pero no sé que me pasa estos días que estoy vaga y desganá, no me apetece salir a la calle ni hacer nada.
Pero bueno, a ver si saco fuerzas para ir a Salsa dentro de 20 minutos (buff... y lo digo desde la cama y en pijama jaja)
Bye bye!
sábado, 25 de febrero de 2012
La playa helada
Ayer fue el día de la independencia en Estonia. Mira yo qué patriótica con la banderita:
Y aproveché la mañana para quedar con unas amigas e ir a la playa. Llevaba mucho tiempo queriendo ir, porque cuando vino Nono con sus amigos me enseñaron las fotos y parecía increíble. Y sí, lo era, mucho más de lo que esperaba. Ya no hacía tanto frío como entonces, pero la playa seguía congelada, toda la arena llena de nieve y no sabías en que momento estabas pisando mar y en qué momento tierra. Creo que es uno de los paisajes más bonitos que he visto en mi vida. En esta foto se ve el centro de Tallin al fondo y lo que hay abajo, esos montones de nieve son olas congeladas.
Aquí tratando de adentrarme en el mar helado sin colarme dentro
Y aquí, "surfing usa". Sí, lo que hay bajo mis pies es una ola.
:D
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